Durante siglos, la pregunta “¿Qué fue primero, el huevo o la gallina?” ha intrigado a filósofos, científicos y curiosos por igual.
Aunque pueda parecer una cuestión trivial, ha desencadenado debates sobre la naturaleza de la vida, la evolución y la biología.
A continuación, analizaremos la ciencia detrás de esta pregunta y consideraremos las teorías modernas que han permitido a los investigadores ofrecer una respuesta plausible a este antiguo enigma.
La evolución y el dilema del huevo o la gallina
Para abordar este dilema, es esencial comprender la teoría de la evolución. Charles Darwin (1859) introdujo la idea de que las especies evolucionan gradualmente a través de la selección natural y la variación genética.
A lo largo del tiempo, las mutaciones ocurren en los genes de una población, y aquellas que confieren ventajas en términos de supervivencia y reproducción se transmiten a las generaciones futuras (Darwin, 1859).
El papel de la genética y la especiación
Con esta base en mente, la cuestión del huevo o la gallina se puede plantear de la siguiente manera:
¿hubo un punto en el tiempo en el que un organismo que no era exactamente una gallina puso un huevo que contenía un embrión con la composición genética completa de una gallina moderna?
La respuesta a esta pregunta se encuentra en la genética y el concepto de “especiación”.
La proteína clave en la formación del huevo
En 2004, un equipo de científicos británicos identificó una proteína clave en la formación de la cáscara del huevo de ave, conocida como ovocleidina-17 (OC-17).
Esta proteína, que solo se encuentra en los ovarios de las aves, cataliza la cristalización de carbonato de calcio, el componente principal de la cáscara del huevo (Nys et al., 2004).
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La historia evolutiva de las aves
Esta investigación sugiere que el huevo, en su forma actual, solo pudo haber existido después de que las aves que poseían la proteína OC-17 evolucionaran. Para determinar cuándo ocurrió esto, debemos examinar la historia evolutiva de las aves y sus antepasados.
Las aves son descendientes de un grupo de dinosaurios terópodos conocidos como maniraptores, que vivieron hace aproximadamente 150 millones de años.
Los fósiles de estos antiguos dinosaurios muestran que ya tenían huevos con cáscaras duras, similares a las de las aves modernas (Chiappe, 2006).
Identificando el punto de especiación
Entonces, ¿cómo podemos identificar el punto exacto en el que ocurrió la especiación entre las proto-gallinas y las gallinas modernas? Aquí es donde entra la biología molecular.
Al comparar los genomas de diferentes especies de aves y rastrear sus diferencias genéticas a lo largo del tiempo, los científicos pueden identificar los cambios genéticos clave que dieron lugar a las características únicas de las gallinas modernas (Zhang et al., 2014).
El estudió proporcionó evidencia de que el último ancestro común entre las gallinas y otras aves, como los faisanes, vivió hace aproximadamente 58 millones de años.
El nacimiento de la gallina moderna
Así, en algún momento durante esos millones de años, un ave que no era aún una gallina puso un huevo que contenía una mutación genética específica, que eventualmente resultó en la aparición de las gallinas modernas.
Esta mutación, en combinación con otros cambios genéticos acumulados, marcó el inicio de una nueva especie: la gallina.
Conclusión
Entonces, ¿qué fue primero, el huevo o la gallina? Desde una perspectiva evolutiva y genética, podemos concluir que un organismo similar a una gallina, pero no exactamente una gallina, puso un huevo que dio origen a la primera gallina moderna.
Por lo tanto, la respuesta más plausible a este enigma es que el huevo fue primero.
Si bien es cierto que este debate continuará generando discusiones y reflexiones en los ámbitos de la filosofía y la ciencia, la evidencia acumulada en las últimas décadas sugiere que podemos estar un paso más cerca de resolver este antiguo dilema.
Referencias
Wow, muy buen reporte
Considerando que hay organismos que se reproducen sin huevos, entonces también sería válido pensar que en algún momento habrían podido existir gallinas y después aparecieron los huevos.