La Tierra es el único modelo funcional que tenemos de un mundo habitable. Por lo tanto, tiene sentido que los astrobiólogos tengan la esperanza de encontrar evidencia de extraterrestres en exoplanetas rocosos similares a la Tierra.
De hecho, el tamaño de nuestro planeta, su composición química, temperatura y su posición en el sistema solar lo han hecho amigable para la vida, al menos la vida tal como la conocemos.
Ahora, los investigadores han identificado una nueva clase de planetas habitables, denominados planetas ‘Hycean’, planetas cubiertos de océanos con atmósferas ricas en hidrógeno, que son más numerosos y observables que los planetas similares a la Tierra.
Este tipo de planetas no existe en nuestro sistema solar, pero abundan en la galaxia. Son básicamente lo que cabría esperar si la Tierra y Neptuno tuvieran un bebé.
Muchos de los principales candidatos a Hycean identificados por los investigadores son más grandes y más calientes que la Tierra, pero aún tienen las características para albergar grandes océanos que podrían sustentar una vida microbiana similar a la que se encuentra en algunos de los entornos acuáticos más extremos de la Tierra.
Estos planetas también permiten una zona habitable mucho más amplia, o ‘zona Ricitos de oro’, en comparación con los planetas similares a la Tierra. Esto significa que aún podrían albergar vida a pesar de que se encuentran fuera del rango donde un planeta similar a la Tierra debería estar para ser habitable.
Se han descubierto miles de planetas fuera de nuestro Sistema Solar desde que se identificó el primer exoplaneta hace casi 30 años. La gran mayoría son planetas entre los tamaños de la Tierra y Neptuno y a menudo se les conoce como ‘super-Tierras’ o ‘mini-Neptuno’: pueden ser predominantemente gigantes rocosos o de hielo con atmósferas ricas en hidrógeno, o algo intermedio.
Los planetas Hycean pueden ser hasta 2,6 veces más grandes que la Tierra y tener temperaturas atmosféricas de hasta casi 200 grados Celsius, dependiendo de sus estrellas anfitrionas, pero sus condiciones oceánicas podrían ser similares a las propicias para la vida microbiana en los océanos de la Tierra.
Dichos planetas también incluyen mundos Hycean “oscuros” bloqueados por mareas que pueden tener condiciones habitables solo en sus lados nocturnos permanentes, y mundos Hycean “fríos” que reciben poca radiación de sus estrellas.
El equipo de investigadores también ha identificado una muestra considerable de posibles planetas ‘Hycean’. El más prometedor de ellos es K2-18b, los candidatos serán estudiados en detalle con el Telescopio Espacial James Webb, cuyo lanzamiento está previsto para finales de este año.
Todos ellos orbitan alrededor de estrellas enanas rojas que se encuentran a una distancia de entre 35 y 150 años luz de la Tierra.
Referencia: Nikku Madhusudhan, Anjali AA Piette and Savvas Constantinou. «Habitability and Biosignatures of Hycean Worlds». The Astrophysical Journal. Published: 26 August 2021.