¿Las mujeres y los hombres ven los colores de forma diferente? Hay algunas pruebas que apuntan a la idea de que los hombres y las mujeres tienen dos experiencias diferentes cuando miran el mismo color.
Los estudios demuestran sistemáticamente que las mujeres son capaces de identificar más colores que los hombres.
Cuando observan la misma escena, las mujeres tienden a percibir matices dentro de otros matices en lugar de ver simplemente un tono plano y uniforme, como suelen hacer los hombres.
Los investigadores saben desde hace tiempo que las mujeres tienen un vocabulario de colores mucho más amplio que los hombres.
Pero, ¿somos tan diferentes? Un estudio realizado en 2003 por el psicólogo Joe Hallock ofrece algunas respuestas interesantes al respecto. Al comparar las preferencias de color según el sexo de las personas entrevistadas, se encontró que el color favorito de hombres y mujeres era el azul.
Esto puede deberse a que el azul se asocia con la limpieza, la claridad, la verdad y la tranquilidad. Sin embargo, lo sorprendente es que ninguno de los sujetos del experimento eligió el morado como su color favorito, a pesar de que este color es muy similar al azul en el espectro de colores.
En 2007, Anya Hurlbert y Yazhu Ling querían descubrir por qué los hombres y las mujeres percibían los colores de manera diferente. Los participantes del experimento fueron expuestos al espectro de colores, que se dividió en dos grupos.
Un grupo contenía colores rojos y verdes, mientras que el otro grupo tenía colores azules y amarillos. Luego, se extrajeron varios de estos colores para rellenar unos rectángulos que se mostraron a los participantes para que expresaran sus preferencias.
El experimento demostró que tanto hombres como mujeres preferían los colores que pertenecían a la gama de los azules, aunque las mujeres también mostraban preferencia por los tonos rosáceos.
Otro de los hallazgos que finalmente demostraron es que lo que para un hombre puede parecer simplemente “morado”, para una mujer puede representar hasta seis colores diferentes, y tienden a nombrarlos en base a colores presentes en la comida, como las frutas.
Otro estudio llevado a cabo por el psicólogo Israel Abramov ha demostrado que los hombres tienen mayores dificultades para distinguir tonalidades de color en comparación con las mujeres.
Según la investigación publicada en la revista Biology of Sex Differences, los hombres necesitan una mayor concentración para poder identificar los mismos colores que las mujeres.
Además, los hombres tienen problemas para distinguir los colores del centro del espectro (azul, verde y amarillo) pero son más rápidos detectando cambios de color a distancia.
Es cuestión de hormonas
Los científicos creen que la expresión de testosterona en las primeras fases del desarrollo desempeña un papel fundamental. Las diferencias en los niveles de testosterona favorecen una organización drásticamente distinta de las neuronas de la corteza visual en hombres y mujeres.
Hay más receptores de testosterona en la corteza cerebral (la parte del cerebro que procesa la información de los sentidos) que en las regiones del cerebro asociadas a la reproducción.
Las mujeres tienen mayor número de receptores de testosterona que los varones en la zona cerebral encargada de la visión. A dicho nivel los varones registran niveles más altos de andrógenos.
Por lo tanto, tiene sentido que un número diferente de receptores dé lugar a diferencias en la percepción visual.
Todo empezó en la prehistoria
Pero, ¿por qué hombres y mujeres perciben el color de forma diferente? Una posible explicación se remonta a las responsabilidades de cazador-recolector de las primeras tribus nómadas.
Como cazadores, los hombres necesitaban poder distinguir entre depredadores y presas desde lejos. En cambio, las mujeres se adaptaron a la recolección de plantas, siendo fundamental los matices cromáticos para este desempeño.
En general, las mujeres tienen un mayor número de células cromáticas en la retina, lo que les permite captar un mayor rango de colores y diferenciarlos mejor.
Además, el cerebro de las mujeres suele ser más eficiente en el procesamiento de la información visual, lo que también contribuye a su mayor habilidad para distinguir colores. Sin embargo, esta ventaja no es universal y puede variar de una persona a otra.
Referencias:
1. Anya C. Hurlbert and Yazhu Ling. «Biological components of sex differences in color preference». Current Biology, 21 August 2007.
3. Israel Abramov, James Gordon, Olga Feldman adn Alla Chavarga. «Sex and vision II: color appearance of monochromatic lights». Biology of Sex Differences, 04 September 2012.