Por primera vez se han detectado microplásticos en la leche materna, y los investigadores están muy preocupados por las posibles repercusiones en la salud de los bebés.
Los lactantes son especialmente vulnerables a los contaminantes químicos y los científicos afirmaron que es urgente seguir investigando. Pero subrayaron que la lactancia materna sigue siendo, con mucho, la mejor forma de alimentar a un bebé.
Mediante microespectroscopia, los investigadores detectaron microplásticos en 26 de las 34 muestras. En total, detectaron 58 partículas de microplástico, todas ellas con forma irregular y la mitad con un tamaño de entre 4 y 9 µm.
En cuanto al tipo de material, el 38% eran de polietileno (PE), el 21% de policloruro de vinilo (PVC) y el 17% de polipropileno (PP), todos ellos presentes en los envases.
Además, se comprobó que los hábitos de consumo de alimentos y el uso de productos de cuidado personal no afectaban a la presencia de microplásticos.
Esto sugiere que la presencia ubicua de microplásticos en el medio ambiente “hace que la exposición humana sea inevitable”.
Investigaciones anteriores han demostrado los efectos tóxicos de los microplásticos en líneas celulares humanas, animales de laboratorio y fauna marina, pero el impacto en los seres humanos sigue siendo desconocido.
Los plásticos suelen contener sustancias químicas nocivas, como los ftalatos, que ya se han encontrado en la leche materna.
Los investigadores no pudieron analizar las partículas menores de 2 micras y es probable que haya partículas de plástico más pequeñas.
Las muestras de leche materna se recogieron, almacenaron y analizaron sin el uso de plásticos y también se procesaron muestras de control para descartar la contaminación.
Efectos de los microplásticos
En un artículo publicado el 18 de junio de 2022 en la revista Environment International, los investigadores informaron de que alimentaron por vía oral a cinco ratones con 1 mg de nanoplásticos no modificados o carboxilados (100 nm) y/o microplásticos (1 µm) desde el primer hasta el decimoséptimo día de gestación.
Posteriormente, investigaron los cambios histológicos en los tejidos maternos y fetales, la expresión génica, la capacidad antioxidante de las placentas y los cerebros fetales, el ácido γ-aminobutírico (GABA) en la amígdala, así como los cambios de comportamiento.
Los investigadores observaron la presencia de nano y microplásticos en el tracto gastrointestinal, el cerebro, el útero y la placenta de ratones preñados, mientras que los nanoplásticos también fueron capaces de atravesar la barrera placentaria para entrar en el cerebro del feto, y aquí el tálamo en particular.
Cuando se exponían conjuntamente con los microplásticos, los niveles de nanoplásticos no modificados y carboxilados en la placenta y el cerebro del feto eran mayores. Los autores señalaron que las partículas de plástico “interrumpían la barrera hematoplacentaria al inducir la apoptosis celular mediada por [especies reactivas de oxígeno] ROS”.
Además, se descubrió que las nanopartículas cambiaban la expresión de los genes en el tálamo fetal y que inducían la producción de ROS y la apoptosis neuronal. Utilizando células de neuroblastoma murino N2A, los científicos comprobaron “el daño oxidativo de las nanopartículas de poliestireno en las células neuronales”.
Además, observaron que la progenie de los ratones expuestos mostraba un comportamiento similar a la ansiedad. Los investigadores concluyeron que “las nanopartículas de poliestireno tienen un impacto negativo en el desarrollo del cerebro fetal a través de la lesión oxidativa y la síntesis de GABA”.
Referencias:
1. Ragusa, A. et al (2022). “Raman Microspectroscopy Detection and Characterisation of Microplastics in Human Breastmilk.” Polymers. DOI: 10.3390/polym14132700
2. Yang, D. et al (2022). “Polystyrene micro- and nano-particle coexposure injures fetal thalamus by inducing ROS-mediated cell apoptosis.” Environment International. DOI: 10.1016/j.envint.2022.107362
Se veía venir ya que los plásticos se encuentran en todas las cadenas de alimentación, bien sea animal o vegetal, solo falta esperar qué daños se van a presentar en los tejidos humanos, ya que creí que todavía no esta claro.
Trabajo evaluando plásticos en las playas de Huatulco y la verdad es que mas del 50% de los residuos son plásticos 😦